El árbitro electoral federal puso en marcha un cambio histórico en la elección de regidores en Chihuahua. El Instituto Nacional Electoral (INE) comenzó los trabajos para trazar los nuevos distritos municipales que se utilizarán a partir de 2027, cuando por primera vez los regidores serán electos directamente por los vecinos de su demarcación y no mediante planillas ligadas al candidato a la alcaldía.
Hasta ahora, los regidores llegan al cabildo por dos rutas. La principal es la planilla encabezada por el aspirante a presidente municipal. Si ese candidato gana, todos los integrantes de la planilla se convierten automáticamente en regidores. La segunda vía es la lista plurinominal, en la que se reparten regidurías según la votación de cada partido. Eso cambiará pronto.
Derivado de una reforma electoral aprobada hace cinco años, en la elección de 2027 los regidores competirán de manera directa, como ocurre con los diputados. Habrá distritos o demarcaciones electorales dentro de cada municipio, y ganará la regiduría el candidato que obtenga más votos en su zona. La intención es obligar a que los aspirantes recorran colonias, toquen puertas y busquen el apoyo en territorio, y no solo desde una campaña municipal centralizada.
Para preparar ese rediseño territorial, el Consejo General del INE aprobó el acuerdo INE/CG1354/2025, en sesión extraordinaria del 27 de noviembre. Con ello instruyó a la Junta General Ejecutiva y a la Dirección Ejecutiva del Registro Federal de Electores (DERFE) a elaborar el proyecto técnico de delimitación. No habrá mapas definitivos hasta concluir todo el proceso.
El acuerdo forma parte de las reformas locales que prevén que en el proceso 2026-2027 entren en vigor la elección directa de regidurías por demarcación. Aun cuando persisten pendientes legislativos en el estado para aterrizar este modelo, el INE sostuvo que la complejidad técnica obliga a iniciar desde ahora los trabajos preparatorios. El marco geográfico debe actualizarse ante cambios poblacionales y normativos, subrayó el órgano electoral.
Como parte del proceso, la DERFE deberá presentar un Plan de Trabajo antes del 30 de enero de 2026. Este documento deberá programar la construcción de diferentes escenarios de delimitación territorial; detallar la consulta previa, libre e informada a pueblos indígenas y afromexicanos; y establecer los mecanismos para presentar y discutir propuestas con autoridades electas y partidos políticos, hasta entregar el nuevo marco geográfico al Instituto Estatal Electoral.
Además, el INE creó un Comité Evaluador integrado por personal especializado en cartografía, vigilancia y operación de campo, encargado de revisar los escenarios técnicos que presenten partidos y representantes de comunidades indígenas y afromexicanas. El Comité deberá rendir un informe final ante la Comisión del Registro Federal de Electores.
Finalmente, la Unidad Técnica de Vinculación del INE notificará al Instituto Estatal Electoral de Chihuahua sobre los acuerdos aprobados y dará seguimiento a las etapas previstas.
Con este rediseño empieza un proceso que promete transformar la manera en que ciudadanos y regidores se relacionan: ahora, para llegar al cabildo, cada candidato tendrá que ganarse voto por voto en su propio territorio.
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